Acaponeta, Nayarit; Marzo 01 de 2010 (Héctor Aguayo):-- A tan solo un año de su arribo al Municipio de Acaponeta, uno de los sacerdotes que han emergido gracias a su carisma y buen trato con la ciudadanía es sin duda alguna Rigoberto Almaraz.
Dentro de los festejos que celebra a un año de su arribo, resulta de manera obligatoria entrevistar a uno de los presbíteros más talentosos que ha llegado a esta región, hubo una sola pregunta de donde se derivo una gran cascada de información la cual es compartida con ustedes.
¿Con que ojos ve Rigoberto Almaraz a los habitantes de esta región dentro del seno católico? “Tenia conocimiento de la comunidad católica pero de hace seis años, una ausencia que tuve y ahora que regreso ha cambiado mucho”.
“Diré que he tenido que partir de cero, fue un año de muchos retos, porque tuve que volver a conocer la situación y la realidad porque ya no es la misma gente con la que estoy trabajando”.
“Como sacerdote, esa distancia de seis años he tenido experiencias que me han ayudado mucho a ser lo que hoy soy, me he topado con muchas novedades y eso me ha servido para seguir creciendo.”
“Puedo decir que Acaponeta me vio nacer como sacerdote, así que, aquí tengo mis raíces, fue donde recibí mucho apoyo y ahora que volví, me percate que a este Municipio le tengo un querer bonito y me siento muy bien correspondido, prueba de ello es que ya estoy cumpliendo un año, realmente esto me parece un sueño”.
Dentro de los festejos que celebra a un año de su arribo, resulta de manera obligatoria entrevistar a uno de los presbíteros más talentosos que ha llegado a esta región, hubo una sola pregunta de donde se derivo una gran cascada de información la cual es compartida con ustedes.
¿Con que ojos ve Rigoberto Almaraz a los habitantes de esta región dentro del seno católico? “Tenia conocimiento de la comunidad católica pero de hace seis años, una ausencia que tuve y ahora que regreso ha cambiado mucho”.
“Diré que he tenido que partir de cero, fue un año de muchos retos, porque tuve que volver a conocer la situación y la realidad porque ya no es la misma gente con la que estoy trabajando”.
“Como sacerdote, esa distancia de seis años he tenido experiencias que me han ayudado mucho a ser lo que hoy soy, me he topado con muchas novedades y eso me ha servido para seguir creciendo.”
“Puedo decir que Acaponeta me vio nacer como sacerdote, así que, aquí tengo mis raíces, fue donde recibí mucho apoyo y ahora que volví, me percate que a este Municipio le tengo un querer bonito y me siento muy bien correspondido, prueba de ello es que ya estoy cumpliendo un año, realmente esto me parece un sueño”.
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