Acaponeta, Nayarit; Enero 17 de
2014 (Héctor Aguayo):- La vida no siempre sonríe de manera favorable a algunas
personas a lo largo de la existencia del ser humano, sin embargo, no es un
factor que la adversidad pueda ser canalizada de manera favorable.
Una de esas personas que no tuvo
esa dicha de ser el hombre exitoso que deseo ser durante mucho tiempo es Carlos
Ignacio Rodríguez Medina, cuyo sueño de ser un gran boxeador fue limitado por
uno de sus seres queridos, quedándose únicamente a participaciones en el
interior del país.
Tras no haber podido concretar su
sueño como lo deseaba, busco de una u otra manera, las alternativas para
realizar lo que él no pudo hacer durante su juventud, hoy, a sus 58 años de
edad, Carlos Rodríguez, ha encontrado ese espacio que tanto anhelaba, tener su
propia Escuela con apoyo de la ciudadanía.
Con gran entusiasmo y dinamismo,
la escuela de Boxeo se cristalizo el año pasado sumándose a ello niños, adolescentes
junto con algunos jóvenes, sin embargo, quienes han puesto mayor empeño y
dedicación a este deporte han sido los niños y los adolescentes.
Hoy en día, con gran dedicación,
Carlos Rodríguez Medina trabaja con cada uno de ellos desde las cuatro de la
tarde hasta las siete de la noche de lunes a viernes en las instalaciones de la
Unidad Deportiva, sin cobrar cuota de inscripción y pago de mensualidades.
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