Acaponeta, Nayarit; Mayo 03 de
2013 (Rogelio Orozco):-- Quizás sean contadas las personas que no hayan podido
disfrutar lo que es el sabor de una manzana, ya sea natural, en refresco, pays,
pasteles, comidas, ensaladas, acarameladas, en sidra o bien como fruta seca en
temporada decembrina.
Este producto se produce en todo
el año, lo que les hace merecedor del cuarto lugar a nivel mundial en la
producción de frutas, tras la uva, naranja y plátano, sin embargo, aunque no
sea la más cultivada, la manzana ostenta el título de “Reina de las frutas”.
Esto se debe a sus grandes
virtudes culinarias y medicinales, a que es la fruta que mejor combina con la
práctica totalidad de los alimentos tal como lo hemos ya podido mencionar
anteriormente.
Las manzanas contienen muy
pequeñas cantidades de proteínas y de grasas. Entre las vitaminas destacan la C
y la E, entre los minerales, el potasio y el hierro; aunque todo ello en
pequeña proporción. En conjunto, sus nutrientes aportan 59 calorías por cada
100 gramos.
También contiene Pecticina, la cual
retiene agua y diversas sustancias de desecho en el intestino, actuando como
una autentica escoba intestinal que facilita la eliminación de las toxinas
junto con las heces, renueva la flora intestinal, evita las fermentaciones intestinales
e impide el desarrollo de tumores cancerosos en el colón
La manzana, después del
membrillo, en cualquiera de sus presentaciones es una de las frutas más ricas
que sirven como astringentes y antiinflamatorios, por poseer Flavonoides,
impide que el colesterol se deposite en las paredes de las arterias y
deteniendo el proceso de la arteriosclerosis, o sea, el endurecimiento y
estrechamiento de las arterias.
El consumir manzanas de manera
cotidiana mantiene sanos a todas las personas, quienes se encuentren enfermos
de diarreas y colitis, les es de gran utilidad porque la pectina de este
producto actúa como una esponja capaz de absorber y eliminar las toxinas
producidas por las bacterias causantes de gastroenteritis y colitis.
Además, debido a sus taninos,
seca y desinflama la mucosa intestinal (túnica que tapiza el interior del
conducto digestivo). Los ácidos orgánicos actúan como antisépticos y
regeneradores de la flora bacteriana normal del intestino.
Se recomienda comer pelada para
evitar los restos que puedan quedar de algún tipo de plaguicida fuerte,
facilitando con ello la digestión; para los niños y ancianos que están
debilitados se recomienda rallarlas ya sea en un rayador de cristal o bien de
acero inoxidable.
Puede consumirla asada al horno
la cual es una forma sabrosa y digestiva de consumirla; el jugo natural es muy
preferible al envasado industrial; cocinada con su respectivo toque en las ensaladas son de gran beneficio para los
niños en su digestión.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario