Acaponeta, Nayarit; Diciembre 09
de 2013 (Héctor Aguayo):-- La
economía familiar, falta de trabajo y los altos costos que se genera en el
diario vivir han estado haciendo sus estragos, principalmente en comunidades
rurales tanto de la región así como de otras personas que provienen de otros
lugares.
Nayarit, tierra bendecida por
Dios y desperdiciada por los hombres es un Estado totalmente político la cual,
lejos de crear beneficios, fuentes de empleos, explotación de sus recursos
naturales continúan siendo una región totalmente monopolizada por quienes se
dicen ser políticos.
Es, una verdadera vergüenza ver,
como Sonora, Durango y Sinaloa han sabido aprovechar debidamente esos recursos
naturales, transformando las zonas áridas en un verdadero vergel haciendo de
sus Estados un verdadero oasis tanto para sus habitantes como para quienes
deciden establecerse dentro de sus territorios.
Un claro ejemplo del poco interés
de beneficiar a los nayaritas es el costo la energía eléctrica, en especial la zona
norte del Estado, el servicio es de lo más alto, a pesar de que en su leyenda
aparece el apoyo del Gobierno Federal.
¿Cómo es posible que en Nayarit quien
tiene en su haber tres importantes centrales hidroeléctricas, Aguamilpa, El
Cajón y La Yesca y es generador de energía hacia otros estados del interior del
país se tenga que pagar una tarifa alta cuando en otros Estados el servicio es
más barato?
Hace ya algunos años en Acaponeta
los ciudadanos, Oscar Nava Flores, Juan Montaño Arciniega y el Profr.
Arturo Romano Casillas intentaron dar solución a este problema a través del
Movimiento Popular de Usuarios (MPU), no faltaron los típicos arrastrados que politizaron
este proyecto de beneficio, poniendo el dedo con el entonces Gobernador Antonio Echevarría Domínguez y Nava, Montaño y Romano fueron encerrado
en los días 7 y 8 de diciembre del 2003, todo por luchar que todos tuvieran un
beneficio.
Posteriormente viene Roberto Sandoval Castañeda, en campaña
para Gobernador, retomo esa visión en dar respuesta para que los nayaritas de
la zona norte tuvieran un servicio de luz eléctrica más accesible, gano las
elecciones y hubo que esperar a que Enrique
Peña Nieto ganara y después, que se acomodara.
Como había necesidad de recuperar
todo lo invertido en la campaña, el alto mando se puso a crear las dichosas
reformas atrasadoras del beneficio de los mexicanos y los nayaritas de
Santiago, Tuxpan, Compostela, Rosamorada, Tecuala, Acaponeta y Huajicori siguen
esperando que la energía eléctrica baje de tarifa.
Ya vivimos el Segundo Informe de
Gobierno, donde se nos dio a conocer que en Nayarit dio muy buenos resultados,
pero en los bolsillos de todos los políticos, porque la realidad es otra, de
ello dan fe todos los que viven bajo este mismo cielo, que hoy, por
misericordia de Dios está fresco.
De corazón deseo que todos los
tepiqueños pudieran vivir en esta zona norte, anhelo esa compañía para juntos
gozar la picazón de los zancudos, del dengue, que nos acompañen a disfrutar la
mayor parte del calor no solo de entrada por salida, sino que vivan dentro de
los municipios que conforman la esta zona.
Quizás, entonces, tal vez, puedan
tocarse el corazón e intervengan a favor de quienes realmente ocupan un
verdadero apoyo como lo es la baja tarifa eléctrica.
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